Usa limones en conserva para potencializar el sabor de aderezos, platillos y cocteles.
1 Rebana cuatro limones limpios en cuartos, detén el corte en la base para que las cuatro partes se mantengan unidas.
2 Rellena los centros de los limones con sal kosher. Apílalos en capas dentro de un tarro con más sal.
3 Exprime suficiente jugo de limones frescos dentro del tarro para cubrir los salados. Cierra la tapa herméticamente.
4 Refrigera por al menos un mes. Mientras más se asienten los limones, más salados y suaves se volverán.
5 Cuando esté lista la conserva, retira la pulpa y semillas, y usa la cáscara ablandada entera, rebanada o picada.